Estamos en el ecuador de 2025 y el mercado inmobiliario madrileño sigue avanzando con fuerza. Si algo ha quedado claro en estos primeros seis meses es que la vivienda en Madrid continúa siendo un activo muy demandado tanto por particulares como por inversores.
Desde HOUSE XXI hemos analizado los principales movimientos del mercado y lo que se espera para los próximos meses.
Durante el primer semestre, el precio medio de la vivienda en Madrid ha subido más de un 5 %. La presión de la demanda, la escasez de oferta y la consolidación del interés inversor mantienen la tendencia alcista, aunque las previsiones apuntan a una moderación de cara a 2026. La subida de tipos de interés, el endurecimiento del crédito hipotecario y la entrada progresiva de nueva obra pueden contribuir a equilibrar el mercado a medio plazo.
Zonas como San Blas, Entrevías, Carabanchel o Puente de Vallecas están ganando protagonismo. Los precios más asequibles, junto con mejores conexiones y proyectos de renovación urbana, atraen tanto a familias jóvenes como a inversores que buscan rentabilidad.
Además, municipios del entorno de Madrid, como Seseña, Valdeluz o Alcalá de Henares, están absorbiendo parte de la demanda por su relación calidad-precio y su proyección a futuro.
Poca oferta y mucha demanda
En el mercado del alquiler, se observa una leve estabilización de precios en los barrios más céntricos y una mayor rentabilidad en zonas periféricas. Mientras que en distritos como Salamanca o Chamberí la rentabilidad bruta ronda el 3–4 %, en barrios como Pavones, Villaverde o Entrevías puede superar el 6 %. Este cambio está atrayendo a inversores que buscan mayor margen de beneficio y menos presión regulatoria.
A pesar del impulso de grandes desarrollos urbanísticos como Madrid Nuevo Norte, Valdecarros o Campamento, la oferta de vivienda nueva sigue sin cubrir la demanda actual. La escasez de suelo, los trámites administrativos y los costes de construcción son factores que siguen condicionando el ritmo de edificación. Se espera que estas nuevas promociones tengan un impacto más relevante entre 2026 y 2028.
Asimismo, Madrid se ha consolidado como uno de los destinos preferidos para la inversión inmobiliaria a nivel europeo, especialmente en el segmento residencial premium y en formatos innovadores como el flex-living. Este modelo, basado en viviendas totalmente equipadas, con servicios y contratos flexibles, está captando el interés de grandes fondos y de nuevos perfiles de arrendatarios.
Por último, el comprador actual valora cada vez más aspectos como la eficiencia energética, la tecnología doméstica integrada, la calidad del aislamiento o la presencia de energías renovables. Esta tendencia no solo responde a criterios ambientales, sino también económicos: viviendas eficientes se revalorizan más y reducen costes a medio plazo.
¿Qué esperar en el segundo semestre de 2025?
- Precios de compraventa: crecimiento moderado, especialmente en zonas con alta demanda y poca oferta.
- Mercado de alquiler: rentabilidad atractiva en la periferia, con limitaciones en las subidas de renta en el centro.
- Inversión: interés creciente en formatos flexibles y en barrios emergentes.
- Oferta de obra nueva: limitada a corto plazo, con expectativas de crecimiento entre 2026 y 2028.
- Vivienda sostenible y tecnológica: clave para la diferenciación en el mercado.
Desde HOUSE XXI seguimos de cerca la evolución del mercado para ofrecerte información actualizada y asesoramiento profesional en cada paso. Ya sea que estés pensando en comprar, vender o alquilar, ahora es el momento de tomar decisiones con visión y estrategia.